Monoteísmo, Destino y Suposición
Shaykh Mohammad Nazim Al-Haqqani An-Naqshibendi.
Shaykh Mohammad Nazim Al-Haqqani An-Naqshibendi.
Sohbat del 06 de junio del 1986.
Alhamdulillah, somos gente del Tawhid (Unicidad de Allah). Somos muwwahidun, siervos de un sólo Dios. Permanecemos lejos del shirk (asociar algo a Allah). Rechazamos el shirk. Rechazamos las peticiones del ego de asociar algo a Dios y combatimos eso. ¿Eso está claro? El ego tiende a oponerse a Janabu l-Haqq en cada asunto. Quiere ir más allá de la asociación, declarando su existencia/dominio. De hecho, su verdadera naturaleza es expuesta por Janabu l-Mawla con lo que dijo Faraón: "Ana rabbukumu l-ala" - (Soy yo vuestro altísimo Señor) (79:24).
Los egipcios adoraban muchos dioses. A Faraón le disgustó ser equiparado con esos ídolos y estableció para sí mismo un estatus que superara a los ídolos. Él afirmó, "Yo soy vuestro altísimo Señor" (79:24). "Rabbukumu l-ala", el superior, el más alto, el máximo. Estas son pretensiones del ego. Superar a Allah, ¡Hasha! Algo peor que la asociación. Entonces, si el ego nos posee interiormente, quiere dominarnos y hacer lo que le place, quiere dominar por encima de Allah. Esto es mucho peor que la asociación. El ego clama unicidad, lo que clama la Divinidad. Por eso nuestra lucha es contra el ego. Quien puede controlar su ego, puede controlar el mundo entero. Quien no puede controlar su ego, no puede influenciar a los demás.
"Allah no pide nada a nadie más allá de sus posibilidades" (2:286). Janabu l-Haqq impone cargas según la capacidad de cada uno. Algunos están en el nivel de la Shariat. ¿Puede el helicóptero elevarse tanto como un avión? Su espacio aéreo es más bajo, su altitud es más baja. Asimismo, los aviones no pueden volar a la altura de los cohetes. [Invitado: El destino y lo designado]
Estamos bajo la generosidad de Allah. Nuestro destino es bueno, nuestro nasib (lo designado para uno) basta. Tenemos concesiones sin fin. Nuestro destino es bueno. Somos un ser sagrado. Para un mal fin, hubiéramos sido creados como burros o serpientes, como ratones o escorpiones. Sin embargo, estas criaturas están contentas de ser creadas y glorifican a Janab Allah. No se quejan sobre su destino. Hombre inconciente. "Es, ciertamente, muy impío, muy ignorante" (33:72). Es el hombre ignorante el que se queja sobre su destino. Como Hombre, ¿cómo puede su destino ser malo? ¿Qué más quisiera que fuera? ¿Quieren ser animales? ¿Por qué se quejan de su destino? En la creación, ¿quién tuvo el honor de ser humano? A pesar de esto, toda la creación glorifica a Janabu l-Haqq, en la satisfacción de haber sido creada. Nosotros no apreciamos eso, "¡Qué destino tengo!", ¿cuál es el problema con tu destino? Fuimos concedidos del mejor destino: ser creados como humanos, existir como ser humano.
Hazrat Bayazid Bastami se encontraba caminando por la calle cuando un cachorrito de perro, hasha min al-hudur, corrió hacia él, quien pasaba con toda su majestuosidad espiritual. (El cachorrito) quedó desconcertado. De todas formas, ese gran santo y Sultan ul-Arifin (Sultán del Conocimiento) se echó a un lado dándole paso al perro y el perro pasó. Sus discípulos, con asombro y perplejidad, preguntaron: "Oh Maestro, Oh Sultan ul-Arifin, ¿es apropiado para usted cederle el paso a un perro? ¿No hubiera preferido que el perro se hiciera a un lado? ¿Qué es esto? ¿Acaso es un señor, un general? ¿Cuál es la sabiduría en esto?". Sin dudas, hay sabiduría en la acción de un Sultan ul-Arifin. Él dijo, "Oh amantes, Oh queridos amigos, ese animal, mientras se acercaba a mí, ¿saben qué dijo? El sordo no puede oír, el ciego no puede ver. Me dijo, 'Oh Bayazid, ¡no seas orgulloso! Quien nos trajo al reino de la creación te vistió con ese atributo y con ese aspecto. A mí, me vistió con este. Tengo apariencia de perro en este reino y tú de humano. Toda alabanza y gratitud sea a nuestro Señor, Janab Allah, Quien te hizo humano. Por eso apareces como humano en el mundo, no por ti mismo. No me mires con arrogancia, fue Allah Quien me dio esta forma en el mundo'. Entonces, avergonzado, le cedí el paso".
Ya que Allah nos vistió con este manto, ¡que vayan al infierno los que se lamentan! La gente debe apreciar su destino. Y en un Hadiz Qudsi, Janabu l-Haqq aconseja y enseña a sus Siervos: "Ana 'inda zanni 'abdi bi" (Soy como Mi siervo piensa de Mí). Hal yazun bi masha. Soy como Mis siervos piensan de Mí, dejen que piensen de Mí como quieran. Dejen que piensen. Así como piensen de Mí, como crean en Mí, eso Soy. Por lo tanto, si uno piensa que Janabu l-Haqq decretó un mal destino, sufrirá un mal destino. "Janabu l-Mawla decretó un hermoso destino para mí". Cuando uno piensa así, será así. De hecho, Janab Allah prohibe su az-zann (los malos pensamientos). Es haram (prohibido) - inna b'ada az-zanni ithmun. Algunos pensamientos son haram, son grandes pecados, dice Él.
Zann (pensamientos), hay buenos y malos. El buen pensamiento es halal, el mal pensamiento es haram. Si pensar mal de los demás es haram, ¿puede ser halal cuando se trata de Allah? Si pensar mal de los siervos es haram, ¿qué será pensar mal de Allah? Es algo inmensamente haram. ¿Cómo se atreven a decir que Allah les decretó un mal destino? Astaghfirullah, astaghfirullah. Ese es el peor pensamiento.
Ciertamente, hablamos de la estación de rida (satisfacción), "No todos pueden probar el bocado de la satisfacción" (Yusuf Emre).
Enlace al vídeo: http://saltanat.org/videopage.php?id=8470&name=1986-06-06_tr_TavhidKaderZan_SN_a.mp4
No hay comentarios:
Publicar un comentario