jueves, 3 de octubre de 2013

"Harun al-Rashid e Ibn Arabi."


Harun al-Rashid e Ibn Arabi
Shaykh Mohammad Nazim Al-Haqqani An-Naqshibendi.



Ashhadu An La ilaha illAllah, wa ashadu anna Muhammadan abduhu Wa Rasuluh, SallAllahu alaihi wa sallam. Astaghfirullah. Min kulli dhanbin wa ma'siyyatin wa min kulli ma yukhalifu dinal Islam. Ya Arhama r-Rahimin. Allahumma ja'alna mina t-tawwabin. Ya Mutatahirin. Wa ja'alna min ibadika s-saliheen. Inna ladhina la khawfun alaihim wa la hum yahzanun. Mina t-Tawwabin, mina l-Mutatahirin. Tawwabin Mutatahirin. La oración de nuestro Maestro tras la ablución, esta es la oración que hacían tras la ablución, ¡qué bella oración!



Madad ya Sayyidi ya Sultan-ul Anbiya, madad ya Sultan-ul Awliya, madad ya Rijal Allah. Janab Allah concedió a los santos hacer milagros, ¿para qué? Para ayudar a quien pide ayuda. La fuerza de los santos no es un adorno, ni la guardan para sí: es para ayudar a los siervos de la nación de Muhammad, ayudan tanto en este mundo como en el más allá. Por eso poseen poderes, teniendo poderes oyen cuando alguien les llama, oyen cuando alguien les llama. Al Profeta Suleimán, cuando la gente hablaba, un viento le llevaba lo que era para él, de hombres y jinn. Igual que él, los santos oyen cuando alguien les llama, y ayudan. La fuerza de hombría que se les da, la fuerza de santidad, la fuerza de beatitud es, por supuesto, para ayudar a los siervos de Allah. Si Él ordena que lleguen a un siervo en apuros, si Él ordena a un Waliullah que vaya y no lo hace, pierde su hombría. El que tiene Hombría, si no tiende la mano a quien necesita ayuda, no puede ser santo. Todos los Awliya tienen esa fuerza, cada Awliya mantiene lo que hay entre el este y el oeste. A quien les llama, se acercan para ayudarles.



También el Profeta, alaihi s-salatu wa s-salam, si no se acercara a su nación, no podría ser profeta: debe tender la mano a los rezagados de su nación. El Profeta, alaihi s-salatu wa s-salam, oye y responde. Si esa nación realmente tiene problemas y pide ayuda, el Profeta, alaihi s-salatu wa s-salam, envía ayuda. Y él ordena a un Waliullah, el Qutub del tiempo; Qutb-ul Wilad, Qutb-ul Irshad, Qutb-ul Aktab, Qutb-ul Mutasarrif: cinco qutubs. Él ordena a uno de esos qutub que cuide de los asuntos de esa nación, que se acerque a ayudarlos. Entonces todo viene por la fe, la gente con una fe completa lo recibe todo, en este mundo y el más allá. Las personas de fe débil no reciben. La gente sin fe, los de creencia débil, si oyen estas palabras, esos ignorantes dirán que somos supersticiosos. Sus propias cabezas son supersticiosas. Quien no aprecia la fuerza de los Awliya es ignorante. Janab Allah da fuerza por "Kun fayakoon" (36:82) ("¡Sé! y es") a los Awliya. Y ellos, por decreto de Allah, dicen "Sé" y lo que piden sucede al momento, Allah les autoriza.



Pero no se puede alcanzar este rango quedándose sentado, con "sentado" queremos decir que para alcanzar ese rango hay que dejar el nafs a un lado, renunciar al nafs, dejar el nafs, para llegar a estos milagros. Escuchar al nafs y a Allah no es posible: para escuchar a Allah, es necesario no escuchar al nafs. Si alguien escucha a su nafs, y dice a Allah "Estoy escuchando", miente. Si escucháis a Allah, ¿cómo obedecéis al nafs? O sea, decís que sois Musulmanes con la lengua, pero el nafs dice desde dentro "No lo soy", pues hace lo que quiere. ¿Cómo alguien que no hace lo que dice Allah, afirma "Soy Musulmán, me someto al Janab-ul Haqq"? Miente. Esto es muy simple, debe daros vergüenza no hacer lo que quiere Allah. Uno dice "Soy Musulmán", ¿qué clase de Musulmán eres? Dices que eres Musulmán, y aún te jactas de tus deseos. Sigues las órdenes de tu nafs, ¿qué Musulmán eres? Quien escucha a su nafs no debe decir que es Musulmán, en cambio, si no escucha a su nafs, está escuchando a Allah. Musulmán es quien escucha a Allah. ¿Con qué derecho dice el que no escucha a Allah "Soy Musulmán"? Miente.



"Lanatullahi ala l-kadhibin", Allah maldice al mentiroso, por eso nada de lo que hace sale bien, sus acciones están quebradas. Alguien maldito no puede tener éxito, es como quien tira sal a un cultivo, y no digo ya veneno: ¿qué pasa si le pone veneno? Destruye su cultivo. Por eso, si alguien está maldito, no ve nada bueno por sus acciones. Que Allah no nos discipline por la sed. Decid bendiciones a Janab-ul Haqq, recitad las bendiciones que nos concedió Janab-ul Haqq. Un hombre fue a la asamblea de Harun ar-Rashid, miró el gran palacio de ese Khalifa, dijo: "Oh Harun, si en el más allá, en el akhirah tienes tales palacios, serás afortunado. Si no, si tras estos palacios caes en una prisión...". Tráeme agua, hijo, no llegamos a concluir, hay mucha gente.



M: En el depósito trabajan, cortaron el agua en la ciudad.



SN: Trae a ese.

Entonces, "Si encuentras tales palacios en el más allá, serás afortunado. Si no, entonces...", no pudo pensar en lo que podría ocurrirle. Es duro tener menos tras haber tenido todo lo bueno, es duro para un hombre ir de lo fácil a lo duro, es como subir una colina. En cambio, es fácil bajar una colina. Mientras nadáis en los placeres de este mundo, la muerte llega de repente, y se lleva el disfrute de todos esos placeres. Quienes disfrutan en este mundo, serán castigados con hambre y sed en su lecho de muerte, en especial los que no rezan. En su lecho de muerte, Janab Allah los castigará con hambre y sed. Aunque les pongáis un tubo de plástico en la boca, y fluyan siete ríos, padecerán sed, sufrirán por la fiebre. Quien no rece, morirá sediento. También tendrán hambre, pero la sed es 70 veces peor que el hambre. Él dice que quien no reza morirá sediento, la sed es un tormento más severo que el hambre.



Así que, entonces, él se quedó en pie mirando: "En el mundo tienes de todo, si lo tienes en el más allá, serás afortunado, Oh Harun". El Sultán se dio cuenta de que no era un hombre cualquiera: si lo fuera no hablaría así, temería por su cabeza. No se puede hablar sin respeto en presencia del Sultán, hay adab hacia el Sultán, se está en pie con adab, según el nivel que se represente. El castigo a quien no tiene adab frente al Sultán es severo. Él entendió que no era un cualquiera, o tendría miedo de hablarle así. Cuando Yavuz Sultan Selim, que el paraíso sea su morada, conquistó Damasco... que Allah haga del paraíso su lugar. Amin. Los baños del viernes... los baños del viernes de Damasco eran famosos, ordenó preparar un baño: "Haré ghusl para el Juma", dijo, "pero que nadie entre, no quiero que haya nadie". Al instante, prepararon y limpiaron el baño más famoso. El Padishah llegó y abrió la puerta, entró con su turbante. Abrió una puerta y entró, abrió otra puerta y llegó al centro, al pilón principal. Abrió la puerta, y en el pilón principal había alguien sentado sobre la plataforma de mármol. El fiero Padishah se puso furioso.



Antes de poder abrir la boca, el hombre sentado en la plataforma dijo :"Hey, gran Selim, ven aquí, ven aquí y frótame la espalda". Quería que le frotara la espalda. Entonces entendió que no era alguien corriente, alguien común no habla así: ¿es fácil hablar así a tan fiero Padishah? Se atreve a hacerlo quien desea morir, pero el Padishah entendió que Damasco es especial, Damasco es la estación de cuarenta santos. Cuarenta Waliullah, grandes santos, que tienen el mundo en sus manos y rigen todos los gobiernos, están en Damasco. Sin autorización de esos cuarenta, Sheikh Adnan Effendi, no rige ningún gobierno, y si firman por uno, aunque le ataquen con todas las bombas y pistolas, no lo quitarán. Esa gentecilla creó fitna en Damasco, Hama, Homs y Aleppo. Queman, destruyen y arruinan el mundo, esa gentecilla. Ese grupo no cree en los santos, esos a quienes llaman "Hermanos Musulmanes". Se hundieron en su propia suciedad. Con permiso de uno de ellos, su gobierno no llega a mañana. En todas partes es así.



Además dijo: "No es un hombre corriente, hay muchos santos en Damasco, veamos quién es esta persona". Fue donde él sin ira; él dijo: "Frótame la espalda". Adnan Efendi, dijo: "Frótame un poco la espalda, hace mucho que busco quien lo haga, eres el mejor. Ya te encontré", esto dijo al gran Sultán. Mientras Sultan Selim frotaba su espalda, el hombre le miró de una forma que hizo temblar al Sultán, con una mirada. Si ellos miran con su fuerza de santidad, los Sultanes se encogen de temor. (Sultan Mehmet Fatih) dijo, "Soy Sultan Mehmed (sea el paraíso su morada). En mi presencia, los que llevan corona, los gobernantes y los pashas tiemblan, balbucean en mi presencia. En cambio, yo balbuceo en presencia de mi sheikh, me tiemblan las piernas", esto dijo. Una vez, (su sheikh) Hz. Akshamsaddin estaba sentado, y él entró. No se movió al entrar Sultan Fatih. Sellim tembló como Fatih, la fuerza de los santos puede hacer temblar a setenta padishahs como Fatih. Cuando ellos miran con majestad, no se puede soportar. Al mirar él así, dijo "¿Me reconoces?" El Gran Selim dijo: "Oh nuestro Sultán, si nos permites reconocerte, lo haremos". Él dijo: "Me llaman Muhyiddin ibnu l-Arabi". Los santos no mienten, no se descomponen. Hadhrat Muhyiddin ibnu l-Arabi, que Allah santifique su secreto, Amin. Os digo esto porque me ordenan que os lo diga.



M: Amanna wa saddaqna.



SN: Y bien, ese santo fue donde Harun ar-Rashid, era santo, al decir eso miró. Harun ar-Rashid dijo: "Oh Sultán del akhirah, favorécenos con tu consejo. Tus palabras son una poción, tu aliento puede devolver los muertos a la vida. Él dijo: "Oh Harun, si estás a punto de perecer de sed en el desierto de Allah, ¿qué le darías a quien te tienda un vaso de agua para calmar tu sed?" Él dijo: "Daría la mitad de mis tesoros a quien se acercara con agua. Daría la mitad de mis tesoros, si fuera necesario". Él dijo: "Bien, muy bien. Y si te bebes todo el agua, hasta que no quede nada, te limpia y quiere salir sin encontrar la forma de salir, si se queda en tu interior, el agua que bebiste y lavó tu sangre, ¿qué harías para dejarla salir?" "Daría la otra mitad de mis tesoros para salvarme de su tormento y alteración". "¡SubhanAllah! Así que tu Sultanato va de beber y orinar: es eso, nada más". ¡Qué valiosos favores tiene Janab-ul Haqq para nosotros! Ellos no se sientan a pensar.



Cada vez que bebáis agua, recordad esta historia en Su nombre. También podéis caer en el desierto de Allah, Él puede cazaros, puede atraparos en la sed. Y Él atrapa a mucha gente en su lecho de muerte. Quizá escapéis en este mundo, pero cuando os aten con cadenas en manos y pies, ¿qué daríais a cambio de no tener sed mientras vuestro espíritu parte? Y muchas veces los doctores dicen: "Va a morir, no le deis agua, no le dejéis beber". Ese hombre arde en su lecho de muerte, pero el doctor dice: "No le deis más agua, igualmente se muere". Si debe morir cuando le den agua, que muera antes. La sed en el momento de la muerte es de dos clases, una es la sed del cuerpo, quizá se va ofreciendo agua. La otra no es una sed material, aunque le arrojen al agua, le entre agua por la boca y salga por todo el cuerpo, seguirá teniendo sed. Aún vertiendo agua en su boca por un tubo, ya no digo humedecer sus labios con algodón, si ponéis un tubo para suministrarle agua, seguirá teniendo sed. Nos refugiamos en Allah. Un hombre sin agua, alguien sediento, se da cuenta de esto en parte, pero la verdadera sed comienza en el lecho de muerte, sigue en la tumba, hasta el Día del Juicio. El hígado de muchas personas rasgará su estómago y saldrá por la sed, el hígado es un almacén de agua. Entonces, si un hombre respeta su adab, sus límites, Janab Allah le protegerá del tormento de la sed. Si no mantiene el adab, Él le hará llegar sed, los manantiales y fuentes del mundo entero no quitarán la sed a esa persona.



Ahora, todos queremos seguir las órdenes de Allah. No es fácil seguir las órdenes de Allah, ¿por qué no es fácil? Podemos escuchar con respeto, no seguirlas. Hacemos muchas cosas, pero si miráis con atención lo que hacéis, no os gusta: ¿a alguien le gusta cómo reza? ¿Hay alguien? ¿Alguien puede decir que le gusta cómo reza, Haji Yashar? Encontrad y traedme una persona que diga que le gusta cómo reza, espero a esa persona la próxima vez. Un hombre o mujer, sheikh o alim, ¿hay alguien? Hacédmelo saber, para besar su mano. Si no hay nadie, si a nadie le gusta la forma en que reza, ¿cómo dedican a Janab Allah esas oraciones que no les gustan? Debemos saberlo. Está claro que no nos gusta, pues no podemos rezar bien. Aunque no podemos, ya Rabbi, además de obedecer Tus órdenes, debe haber virtudes en estar atado a esas órdenes, por supuesto, para que sean válidas en presencia de Janab-ul Haqq, y se sigan las órdenes de Janab-ul Haqq. Y Janab Allah sigue aceptando las oraciones que hacemos de cualquier manera.



Si viéramos los Ángeles de la izquierda y la derecha, nadie se tendría en pie, perderían la cabeza y se desmayarían debido a su belleza y majestad. Esos Ángeles son bellísimos, sentiríamos vergüenza de estar frente a ellos. Al verlos, nuestra mente se deslumbraría. A Jibrail alaihi s-salam, Janab-ul Haqq le favoreció con una belleza completa, Él lo creo así. Jibrail alaihi s-salam se puso en pie para ofrecer 2 rakats de oración, hizo la oración de shukr, ofreció shukr por ser creado tan majestuoso y bello. ¿Cómo es su oración? 2 rakat, en cada rakat estuvo 20 mil años en qiyam, completó 2 rakat en 40 mil años, Jibrail alaihi s-salam. Al terminar su oración, alzó su cabeza para dar salam, y llegaron las palabras de Janab-ul Haqq: "Oh Jibrail, por Mi gloria digo que la nación de Mi Amado, en el final de los tiempos, ofrecerá 2 rakat de oración como estando fuera de sí". Al ponerse en pie para rezar, sólo tendrán en la cabeza su trabajo, tendrán en mente el dunya, apartarán su corazón de Janab Allah y evitarán el servicio a Janab-ul Haqq. Tendrán muchas preocupaciones en el corazón, y rezarán 2 rakat de prisa, rápido, rápido, con el corazón ocupado en este mundo. Lo que hagan así quizá dure dos minutos, quizá haya hombres que lo hagan rápido, en un minuto. No. Veo que Bulent también es de ese grupo, se inclina a ruku, ¿se levantó de ruku? Lo veo y ya está haciendo sajda, no está claro cuándo bajó y subió en el ruku.



"Aún así, sus oraciones, los 2 rakat que ofrecen, las oraciones que hacéis, y que ellos hacen en dos minutos, esas oraciones que ofrecen Me serán más queridas que las oraciones de 40 mil años que tú hiciste", dice Janab Allah. "Si preguntas por qué, Oh Jibrail, o a quien pregunte, aquí hay una respuesta: Oh Jibrail, tu ofreciste estos 2 rakat de oración de manera voluntaria, en pie durante 20 mil años en qiyam, sin que Yo te lo pidiera, mientras ellos lo harán por Mi orden. Acatarán Mi orden, harán esos 2 rakat y dirán: 'Esta es la oración fard que nos ordenó Janab Allah', dirán: 'Hagámosla'. Harán la ablución, irán a una mezquita, harán esos 2 rakat. Y esos 2 rakat de oración serán muy valiosos en ese tiempo, pues los harán por Mi orden, mientras tú lo hiciste por tu propio deseo". Con esto, Él muestra la diferencia de valor entre las oraciones nafl y las fard. Por eso, si alguien no puede rezar cinco veces al día, debe rezar una vez al día; es más aceptable en la oración de la mañana.



Así admite su servicio y comienza su vida, dice: "Ya Rabbi, prostrándome a Ti comienzo mi día, y todas mis acciones son para complacerTe". Si pone tal intención, sus acciones serán en paz, en este mundo y el otro. Lavaos la cara y las manos por la mañana, lavaos también los pies, poneos de cara a la Qibla. Si sabéis el Bismillah, entonces con Bismillah, si sabéis la Fatiha, entonces con Fatiha. Si no la sabéis, entonces con "Qul huwa Allahu ahad", haced 2 rakat. Complaceréis a Janab-ul Haqq, cuando Janab-ul Haqq está complacido con un siervo, lo dará a conocer a todos Sus buenos y devotos siervos, y ellos lo aceptarán, pues a quien acepta Janab-ul Haqq, lo aceptan también todos los siervos piadosos. Se regocijarán.



Y nuestra asociación de esta noche llega hasta aquí. Os dejó claros algunos puntos importantes, prestad atención. Un nuevo año hijri se acerca, intentemos recuperar en este año lo que perdimos en años anteriores. Si damos un paso hacia Allah, Janab-ul Haqq estará diez pasos más cerca. Por eso, prestad atención a postraros, y junto a la postración, poned la intención de servir a Allah, mantened el deber que aceptáis. "Ajallu l-karamat dawamu t-tawfeeq" (el mayor milagro es el éxito duradero), una gracia y favor de Allah. Entonces Janab Allah os llevará a la felicidad en este mundo y el más allá. El éxito es de Janab-ul Haqq, pedidlo. Bi hurmati l-Habib, bi hurmati l-Fatiha.



Enlace al vídeo: http://saltanat.org/videopage.php?id=9194&name=0000-00-00_tr_HarunResidVeIbnArabi_SN_a.mp4

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