jueves, 7 de agosto de 2014

"Por Amor a Allah."



Por Amor a Allah
Sheij Mehmet Al-Haqqani An-Naqshibendi.
Sohbat del 23 de julio del 2014.



Sea la paz, la misericordia y la bendición de Allah con ustedes.



Me refugio en Allah ante el vil satán. En el nombre de Allah, El Más Misericordioso, El Más Compasivo. Dennos soporte, Oh Rasul'Allah, Oh distinguidos compañeros de Rasul'Allah. Dennos soporte, Oh Sheijs, Oh Sheij Abdullah Faiz Ad-Daghestani. Ayúdanos, Oh Mawlana Sheij Muhammad Nazim Al-Haqqani, autorízanos. Nuestra vía es de asociación y lo mejor está en la reunión.



Alcanzamos los días sagrados, shukr/gracias a Allah. Esta noche también es sagrada. Que sus bendiciones estén con nosotros, insha'Allah. Por supuesto, Allah sabe cuál noche es. Los Sahabas/Compañeros le preguntaron a nuestro Profeta cuál noche es. Él dijo que a veces es la del 23. Cuando otros preguntaron: el 24, y así sucesivamente. Claro que varía, no es igual cada año. Eso no está claro, es algo oculto, pero si obramos con la intención de la misma, sus bendiciones estarán con nosotros, insha'Allah. Muestren respeto por esa noche. Los Awliya/Santos, nuestro Profeta, los Sahabas respetaron esa noche. Nosotros también debemos respetarla y revivirla con la intención de que la Noche del Poder sea esta noche,insha'Allah. Que sea buena, bendecida y que llegue a muchos.



¿Cómo es la Noche del Poder? Nuestro Maestro dijo que a veces es lluviosa y a veces no. Todo eso es correcto, porque como no sucede en un día fijo, sino en días variados, distintas manifestaciones toman lugar. Por eso, es necesario asumir que cada noche es la Noche del Poder y respetarla al menos un poco. Es necesario que se cuiden, que respeten la noche y se guarden de los pecados, que adoren a Allah y den caridad en Su camino.



Hay muchas cosas que Allah ama, pero lo más amado es la generosidad. Allah provee a quienes alimentan a los demás, los mira con ojos de misericordia y los provee. Una vez, Hz. Alí no tenía comida en su casa. Un verso del Corán referente a él descendió entonces. Claro que, en los viejos tiempos, los Sahabas y nuestro Profeta no corrían tras el dinero. Así que cuando tenían dinero lo daban como azaque o caridad. A veces se quedaban sin nada. En ese momento, Hz. Hassan y Hz. Huseyn tenían hambre. Hz. Alí vendió algo y compró harina, con lo que hizo algunos panes y cuando se sentaron a comer, alguien llamó a su puerta. Era un hombre pobre. Hz. Alí había cocinado 3 panes para sus hijos y para él. Cuando tocaron su puerta, él le dio 2 panes al hombre pobre. Entonces, a los niños solo les quedó un pan y a él ninguno. Lo mismo pasó al día siguiente y al tercer día. En lo adelante, él obtuvo una recompensa tan grande que descendió un verso del Corán sobre ellos.



Había personas que amaban alimentar a los pobres. Esos eran los temerosos de Allah, los que daban por amor a Allah sin esperar ningún agradecimiento a cambio, ninguna remuneración ni agradecimiento por lo que hacían. Por supuesto, hubiera sido bueno que la gente les agradeciera, pero ellos no pretendían ni eso.



Si alimentan a alguien, debe ser con algo agradable y apetitoso. Así es una mesa de Allah, una mesa de Allah. Coman, así ustedes ganen fuerza y nosotros fe. Insha'Allah, así nuestra fe se fortalece. Lo que a Allah más le desagrada es que esperen algo a cambio por lo que hacen. Claro que esperan algo a cambio venido de Allah. Pero lo otro puede ser esperar las gracias de quien beneficiaron. Dicen "Para nada". Pero ellos no quieren las gracias, ni siquiera rangos más altos. Lo hacen sinceramente, por amor a Allah, lo más puro. Dicen: "No necesitas darme las gracias".



Sin embargo, algunas personas piden algo a cambio. Dice en el Corán que sus obras están vacías. Si piden algo a cambio, si dicen: "Hice esto, mira lo que hice por ti", ese bien no será aceptado. Le dicen a quienes no conocen "Te estás comiendo mi comida". No digan eso. Esa no es una buena característica. Dar por amor a Allah, eso es bello. No lo arruinen, digan: "Por Allah, come y disfrútalo". Deseen que eso se torne en luz y fe. Nuestro Profeta ama que den comida a todos, a los pobres, a los visitantes, tanto a los ricos como a los pobres. Hay gente que da comida solo para fanfarronear ante los ricos. A esos no les importan los pobres. Eso tampoco es bueno. Deben dar a todos, tanto a los ricos como a los pobres. Dejen que su mesa se abra. Que Allah conceda bendiciones, insha'Allah.



Alhamdulillah, esta noche estamos alcanzando la Noche del Poder, la noche más sagrada. El día 27 de Ramadán es famosa para la Noche del Poder, pero no todos los años es la misma. Muchos años cae el 27, en la mayoría, pero en muchas otras ocasiones cae otro día. A veces los Sahabas le preguntaban al Profeta -sallallahu alaihi wa sallam- cuándo era la Noche del Poder. A veces él decía el 23, otras veces el 24. Le preguntaron cómo era, a lo que él respondió que debía llover. El año próximo le preguntaron y dijo que no llovería. Todos sus dichos son ciertos, ya que esa noche cambia. No es una noche fija, sino que cambia. Entonces, el Profeta -sallallahu alaihi wa sallam- decía cada vez algo diferente. Pero él nunca le dijo a losSahabas ni siquiera cuál noche era. Él dijo que esa noche hicieran esta súplica: "Allahumma inni as'aluka l-afuww wa l-afiyah. Allahumma inni as'aluka l-afuww wa l-afiyah".



Esa es la mejor súplica, la que reza por nuestro perdón. Que Allah nos perdone y nos dé salud. Eso es lo más importante que un creyente debe pensar. Afuww significa estar en el camino recto, así Allah esté feliz con ustedes y los perdone. Lo otro significa estar en buena salud. Lo más preciado en esta vida son estas dos cosas. Lo otro viene y se va. En cambio, si tienen eso estarán felices y libres de problemas.



A Allah Azza wa Jalla y al Profeta -sallallhu alaihi wa sallam- les agrada la generosidad, especialmente que alimenten a los pobres. Sobre Sayyidina Alí -karram Allahu wajh-, Allah envió un verso del Corán (Sura Insan: 7-11), también sobre su esposa Fatimatu z-Zahra -radiallahu anha arda- y sus hijos, por una vez que cocinaron pan. Ellos no estaban comiendo mucho, ya que no se afanaban por el dinero. Tampoco el Profeta -sallallahu alaihi wa sallam- ni los Sahabas. Cuando tenían dinero lo daban rápidamente a los demás, como azaque. Así que a veces no encontraban qué comer.



Una vez como esta, Sayyidina Alí no tenía nada. Salió a vender algo de su casa para traerles comida a los niños. Ese día Sayyidatuna Fatimatu z-Zahra cocinó 3 panes, 2 para ellos y uno para los niños. Cuando quisieron comer, les tocaron la puerta, llegó alguien: "Tengo mucha hambre, muero de hambre. Por favor, por amor a Allah, denme algo". Se apresuraron a darle los 2 panes que iban a comer. Al día siguiente y el tercer día pasó lo mismo. Después, sobre eso, Allah envió versos de una Sura del Corán (76: 7-11) que elogian a esas personas, a quienes se complacen en alimentar a los demás sin esperar nada de ellos, ni siquiera las gracias. No quieren ni que les agradezcan. Dan por amor a Allah y temen al Último Día, el Día del Juicio, un día muy pesado. Pero Allah les concede el Paraíso, les da sombra en el Paraíso y algo genial, un lugar muy bello. Entonces, incluso cuando ellos hacen eso, Allah los recompensa hasta el Día del Juicio. Todos han leído esa Sura (Insan)donde ellos son recordados, Sayyidina Alí y su familia -karamallahu wajh, radiallahu anha-.



Así que, cuando den comida deben hacerlo por Allah, a los pobres; ni siquiera importa si son pobres, también a los acomodados, pueden darles a todos. Pero no hagan algo para que les rindan pleitesía. ¿Qué es eso? Cuando dicen "Oh, mira lo que te di, es mi comida, debes estar contento conmigo por lo que hice". Eso es lo que a Allah le desagrada. Él dijo en el Corán que quienes hacen eso arruinan el bien que hacen (2:264). Así, solo dan y dan, pero satán y sus egos arruinan todo el bien que hacen.



Simplemente, cuando dan, deben alegrarse de que esa persona está comiendo. Allah proveerá para ustedes. Allah puede. Mucha gente rica que tiene no millones, sino billones, no puede hacer lo que una persona común hace por los demás. Tienen de todo, mucho dinero, pero no pueden dar. Entonces, deben sentirse felices si Allah les permite hacer todo ese bien. No sean tan tontos como para arruinar lo bueno que hacen por nada. Solo den y alégrense mientras aquellos comen.



El Profeta -sallallahu alaihi wa sallam- dijo que, cuando cocinen sopa le viertan una olla de agua, así guarden para otras personas. Denle a sus vecinos y a otros, ya que el agua hará que rinda más y más. A Mawlana también le gustaba alimentar a la gente. Algunos llegaban a media noche. Cuando él estaba fuerte, como nosotros o Hajja Anne estábamos durmiendo, él les preparaba algo especial con sus propias manos. Y Alhamdulillah, eso es una bendición. Que Allah nos dé, insha'Allah, esa bendición para toda la vida. Insha'Allah, que podamos alimentar a los demás. Nada es muy difícil si Allah lo quiere.Insha'Allah, para todos, uno, dos...



Cuando estábamos en Damasco éramos niños pequeños. Ese tiempo no era como este. Los que sabían, los visitantes que iban eran pocos. Quizás iban 7, 8 o 10 personas en una semana. Entonces, Hajja Anne cocinaba para 4 personas alrededor nuestro. "Ve y sirve, llévale esto a la señorita, esto para el anciano...", así brindaba. Si no había visitantes en la casa, ella hacía mandar la comida. Y Alhamdulillah, ahora es más. Insha'Allah, Mawlana bastaba para el mundo entero. Venían de cada lejano país, y por su bendición, todos encontraban algo que comer. Alhamdulillah, ese es un favor de Allah.Alhamdulillah, que Allah prolongue esa bendición por él, por nosotros, por todos nuestros seguidores, insha'Allah. Que les dé más y más y más bendiciones, insha'Allah.



Wa min Allahi t-tawfiq al Fatiha.



Enlace al vídeo: http://saltanat.org/videopage.php?id=12027&name=2014-07-23_tr_ForTheSakeOfAllah_SM.mp4

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